¡Buenos días!
Hace unos días subí una entrada al blog hablando del furor que está causando el punto esta temporada, y como es un tejido que me chifla, hoy os quiero mostrar el estilismo de lana y flecos que llevé el otro día.
Si tenéis curiosidad por descubrir más acerca de este look, no dejéis de echar un ojo al post.
¡Vamos allá!
Para empezar, como podéis apreciar en las imágenes, el otoño siempre es un marco incomparable para hacer unas bonitas fotos.
Además, el día que estrené este estilismo de lana y flecos nos acercamos al maravilloso Parque del Capricho a pasear y ¡aluciné con el encanto que tiene!
No sé si conocéis este jardín histórico situado en Alameda de Osuna, pero os recomiendo visitarlo porque sus rincones son de ensueño.
Parte de su encanto se debe a que, en su día, ilustrados artistas crearon recorridos, láminas de agua y preciosas estancias para realzar aún más la belleza del entorno.
Es un jardín caprichoso, y nunca mejor dicho 😉
Pero vamos al grano porque aún no os he hablado de mi estilismo.
Con un favorecedor color nude, este outfit de lana y flecos me hizo sentir muy a gusto en un marco 100% otoñal.
Considero que los flecos aportan mucho estilo y que el punto es un tejido ideal para el otoño/invierno.
Aún y todo, la lana puede aportar volumen extra a la figura, por eso mismo en mi look, el volumen XL del jersey lo compensé con la ajustada falda midi.
Por cierto, ¿conocéis los procesos artesanales de la obtención de la lana?
Me parece todo un arte siempre que se haga con conciencia y mucho amor hacía los animales.
Primero se esquilan las ovejas, un trabajo que se realiza desde hace miles de años y que es importante hacerlo de manera delicada pero eficaz.
Después viene el lavado de la lana, un proceso muy importante del que depende la calidad final del producto.
Luego se da paso al escarmenado, que consiste en peinar y estirar la lana una vez está seca separando cuidadosamente las fibras sin que éstas se corten.
Después se crean las madejas, los ovillos en forma de aspa que se vuelven a lavar para eliminar cualquier residuo que les haya quedado.
Finalmente sólo faltaría teñirlo y devanarlo.
¿No os parece un proceso en el que hay que depositar grandes dosis de mimo?
De este trabajo tan artesanal nacen conjuntos de lana y flecos como el mío, que además de bonitos y estar de moda, son muy calentitos para el invierno.
Espero que os haya gustado el post y las fotos de Jose Luis.
¡Feliz comienzo de la semana!
Qué bonito el look y las fotos! y qué interesante el proceso de la obtención de la lana, gracias por liustrarnos de esta manera Maialen!
Besos!
Las fotos donde sales ¡ las más bonitas! Muxu